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¿Qué puedo comer durante el embarazo?

La Habitación Saludable, Nutrición

Si estás embarazada, enhorabuena. Ahora más que nunca estarás pensando en cómo cuidarte y cuidar de tu bebé. Pues bien, como ya sabrás, una buena alimentación es clave, y aunque prácticamente con ‘comer-bien’ nos valdría, hay alimentos que debes evitar, bien porque pueden sentarte mal, bien porque pueden dañar a tu bebé. Vamos a intentar resolver las posibles dudas que tengas y a darte algún truquillo para que sigas disfrutando de platos suculentos.

1. Huevo

Los huevos pueden transmitir Salmonella, sobre todo en verano, ya que las altas temperaturas favorecen su desarrollo.

Debes evitar:

• Huevos con la cáscara rota, sucia o deforme; así como consumirlos fuera de la fecha de consumo preferente
• Huevos crudos o parcialmente cocinados. Esto incluye: helados, mayonesas, postres, ponches,… y todo alimento en el que se añada huevo y no se garantice una cocción completa. Los productos comerciales, según la legislación española, deben ser preparados con huevo pasteurizado, lo que eliminaría el problema de la salmonella. Pero siempre lee el etiquetado antes de consumirlo, y que especifique que ha sido pasteurizado.

2. Lácteos

La leche puede contener Listeria monocytogenes, una bacteria patógena, que, aunque es rara, es importante tener ciertas precauciones en el embarazo ya que puede provocar serios daños, e incluso la muerte en el feto. Los productos lácteos que consumas deben haber sido pasteurizada o haber seguido un tratamiento a temperaturas ultra-altas (UHT), para disminuir el riesgo.

Yogur casero

Puedes consumir cualquier tipo de yogur comercial. Si los haces en casa, simplemente asegúrate de prepararlos a partir de leche pasteurizada o que haya seguido un tratamiento a temperaturas ultra-altas (UHT).

Queso

Es muy importante que en la etiqueta diga que están hechos con leche pasteurizada.

Debes evitar:

• Quesos blandos o cremosos con cubierta blanca
  No comas quesos tipo brie o camembert. Estos quesos han sido madurados con mohos y solamente pueden ser consumidos si antes han sido cocinados.
• Quesos azules
  Quesos como gorgonzola y roquefort, al igual que el resto de quesos blandos, solo pueden ser consumidos si han sido cocinados.

En general, los quesos blandos, al ser menos ácidos y contener mayor humedad que los duros, favorecen el desarrollo de bacterias patógenas como la listeria (la listeriosis es rara, pero es importante tener ciertas precauciones en el embarazo ya que puede provocar serios daños en el feto).

Puedes comer:

• Quesos duros
  Al contener poca agua, es más improbable que crezcan bacterias en ellos.
• Quesos hechos con leche pasteurizada
  Puedes comer quesos que se hagan con leche pasteurizada: manchego, parmesano…
• Quesos blandos considerados seguros
  Todos aquellos que no hayan sido madurados con mohos. Puedes comer quesos de untar, mozzarella, feta, ricota, cottage, hallumi, queso de cabra…
• Quesos cocinados considerados seguros
  Al cocinarlos se elimina cualquier bacteria, por lo que debería ser seguro consumir así cualquier tipo de queso, incluso los madurados con moho. ¡Eso sí, debes asegurarte de que está bien hecho!

Helado

Puedes tomar helados, simplemente asegúrate de que han sido preparados con leche y huevos pasteurizados. También, asegúrate de que el helado ha sido conservado correctamente y no se ha roto la cadena de frío (que no se haya descongelado y vuelto a congelar).

3. Productos cárnicos

 Carne cruda

La carne cruda o poco cocinada, tiene un gran riesgo de provocar toxoplasmosis, infección causada por un parásito que puede afectar a la salud del feto. Por ello, es importante cocinar bien las carnes durante el embarazo, asegurándose que no haya restos de sangre, ni color rojizo, sobre todo en carnes de ave, cerdo, salchichas y carne picada, incluyendo hamburguesas y carpaccios. A su vez, es importante lavar bien los utensilios utilizados para manipular la carne cruda, junto con una adecuada higiene de manos.

La toxoplasmosis no suele presentar síntomas, pero si crees que podrías haber estado en riesgo acude al médico o matrona ya que existe un tratamiento para la toxoplasmosis.

Embutidos

Si no estás inmunizada frente a la toxoplasmosis, debes evitar el consumo de productos cárnicos crudos curados. Las carnes curadas en frío como el embutido (chorizo, salami, salchichón, jamón serrano, pepperoni…), no están cocinadas, solo se curan y se fermentan, por lo tanto existe riesgo de que contengan parásitos que causen toxoplasmosis. Una alternativa para poder comerlos sería congelarlos durante 4 días antes de su consumo para matar cualquier parásito. Por otro lado, si vas a cocinar el embutido, por ejemplo introduciéndolo en una pizza o unas croquetas, no sería necesario congelarlo previamente. Los productos cárnicos loncheados envasados, sí pueden consumirse después de cocinarlos a más de 71ºC.

Carne de caza

Se debe evitar durante el embarazo ya que pueden contener perdigones de plomo, aumentando así los niveles de plomo de la carne.

Hígado, paté y foie

El consumo de hígado y sus derivados como el paté o salchichas de hígado, puede dañar al feto por su alto contenido en vitamina A. Además el paté ya sea de hígado o de vegetales, al igual que ocurre con el foie, pueden provocar listeriosis. La listeriosis la provoca una bacteria llamada Listeria monocytogenes, la cual puede ocasionar daños muy perjudiciales para el feto.

4. Pescado y marisco

Comer pescado es muy bueno tanto para la salud de la madre como para el desarrollo del feto durante el embarazo, y se puede comer la mayoría de tipos de pescado. Sin embargo, algunos tipos se deben evitar o limitar.

Pescados crudos

El consumo de pescados crudos, tipo sushi, sashimi, ceviche o carpaccios durante el embarazo, puede provocar infecciones bacterianas o de parásitos perjudiciales como el anisakis, tanto para la madre como para el desarrollo del feto, siempre y cuando no hayan sido congelados previamente.

Pescados altos en mercurio y PCB

Un alto consumo de mercurio puede afectar al desarrollo del sistema nervioso del feto. Por ello, se deben evitar pescados como el pez espada, tiburón o marlín y limitar el consumo de atún  ya que son altos en mercurio.

También se recomienda evitar comer más de dos raciones de pescado azul a la semana, ya que pueden contener contaminantes como dioxinas y bifenilos policlorados (PBC) perjudiciales para la salud del feto. En este grupo entrarían pescados como el salmón, la caballa, la trucha, el arenque y el atún fresco. El atún enlatado no cuenta como pescado azul, por lo tanto se puede comer además de la cantidad máxima de dos raciones de pescado (siempre que no sea atún fresco), pero se recomienda no comer más de cuatro latas medianas a la semana en el embarazo por su contenido en mercurio.

Por lo tanto, los pescados más seguros para comer serían pescados blancos previamente congelados para evitar toxiinfecciones, mariscos cocidos (mejillones, langosta, cangrejo, langostinos, vieiras y almejas) y pescados ahumados (salmón ahumado).

5. Café, té, infusiones y regaliz

Durante el embarazo es recomendable reducir la cantidad de cafeína, ya que unos niveles altos pueden provocar bajo peso al nacer o incluso un aborto espontáneo.

Café y té

La cafeína se encuentra naturalmente en alimentos como el café, el té (incluido el té verde) y el chocolate, y también se añade a algunos refrescos y bebidas energéticas. No es necesario eliminarla por completo, pero se debe limitar a unos 200 mg al día, lo que serían unas 2 tazas de café al día. Es decir, si normalmente tomas café o té, puedes seguir tomándolo ya que el riesgos es bajo, pero te recomendamos que reduzcas la cantidad. Si lo que te gusta es su sabor, prueba con té y café descafeinados.

Infusiones de hierbas

En cuanto a las infusiones de hierbas durante el embarazo existe poca información sobre su seguridad, por lo que es mejor beberlos con moderación. La Agencia de Normas Alimentaria recomienda no beber más de 4 tazas de té verde o de hierbas al día durante el embarazo.

Regaliz

En cuanto al regaliz se pueden consumir cantidades moderadas de dulces de regaliz o tés de regaliz durante el embarazo; no hay ninguna recomendación para evitarlos. Sin embargo, se debe evitar la raíz de regaliz.

Esperamos haber aclarado y resuelto todas tus dudas. Muchas gracias por visitar nuestro blog y no olvides dejar un comentario! Suscríbete a nuestra newsletter y no te pierdas la próxima entrada. No dudes en ponerte en contacto con nosotros. Estaremos encantados de ayudarte. 🙂

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